Nunca, nunca es casualidad encontrarlas
están en algún lugar del camino
para darnos una mirada que nunca olvidaremos,
para regalarnos una sonrisa que nos marcará de por vida,
para dejarnos huellas que nos caminan en el alma
para decirnos palabras que se quedarán aleteando como pajarillos en la mente
no importa que tanto del camino recorrieron a nuestro lado
en esa parte sus manos han sembrado
semillas de sueños, de ilusión,
de esperanza que ha quedado
germinando en el corazón,
nunca es casualidad encontrarlas
no importa si las elegimos o no
si las dejamos o nos dejaron,
o si por siempre se quedaron
llevaremos una canción, una palabra,
un aroma, una imagen, un instante pleno
que nunca olvidaremos
una marca de por vida
no importa que tan lejos caminemos
llevaremos huellas caminandonos el alma
quizas las herimos o nos hirieron
pero una bella parte en la historia escribieron
y perdonada la herida
queda pegada en nuestra húmeda retina
aquella serena, luminosa sonrisa
no fue casualidad encontrarlas
madres, hermanas, amigas, novias, esposas,
maestras, amantes, casuales o importantes.
Sonrisas, caprichos, regaños y repetidos dichos
Carcajadas, caricias, gritos, intensos latidos
La forma singular de pronunciar nuestro nombre
La forma singular de enseñarnos a ser HOMBRES.
Julio Valencia.
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El Rincón de El Poeta. 
Hola Julio, un lindo homenaje a la mujer, gracias por la parte que me toca.
Un fuerte abrazo.
Hola hermanito, me alegra que no se te haya olvidado mi dulce voz.
Julio bello como todo lo que escribes …
Gracias querido Julio, hermoso poema !
María