Escurridizo y apresurado conejo
de los sueños
que te escapas entre escondrijos
de misterio
quizás sólo eres una jugarreta
del tiempo
te he perseguido golpeado y
sin aliento
hasta resbalar por el pozo
del tormento
en caída libre tan lenta y
sin freno
como si se m e fuera la vida
cayendo
asi rasgué y desgasté la piel
del entendimiento
entonces la melancolía recubrió
mi esqueleto
hasta que fuí a dar con el salón
de los secretos
encontré cien puertas y llaves
que no abrieron
bebí el vino delirante del
«te espero»
me embriagó de dolor y volvió
tan pequeño
luego una galletica sin sabor me dobló
el cuello
hasta que desmayé en el lago
de los sentimientos
apresurado y absurdo conejo
de los sueños
¿Cuándo tu reloj de bolsillo marcará
mi tiempo?