Creíste en la fuerza
de mi alma
inventaste un mundo
y lo cargaste en mi espalda
como un Atlas de piedra
que mira a la esperanza
mientras la hiedra
trepa hasta mi garganta
cree aunque no veas
repetía como mantra
las voces del delirio
me arrullaban
bofetadas de realidad
me despertaban
pesa el universo
a mis espaldas
siempre un verso
fue mi espada
mientras esperaba un beso
de la nada
dejé el mundo
en que habitaba
para cargar el tuyo
tu mundo de hadas
¿Cómo puede cargar un planeta
el alma solitaria?
por las noches
tus cuentos recitaba
mientras en otro universo
tú danzabas
inquieta mariposa
que tus alas agitabas
creando olas
que me ahogaba
tan leve y tan potente
tan frágil y pesada
creíste en la fuerza
de mi alma
yo ya no creo
en nada…
